Se acabaron las vacaciones, creo que esto lo debí poner en el artículo anterior, pero no esperaba subir el del capítulo 13 en Enero, como sea, acabamos de ver un nuevo episodio de nuestro slime y, aunque la guerra en el campo de batalla ya ha acabado, queda aún por resolver las consecuencias de ésta guerra, pero enfoquemonos en lo que nos compete ahora, el capítulo de ésta semana.
La batalla final parecía un mero tramite, ya han acabado con el fuerte de las filas del ejército del Orc Lord y ya se veía en el horizonte la aparición del hombre que comanda las fuerzas del hambre. Pero sin previo aviso, en el campo de batalla aterriza el ser que ésta detrás de todo, o más quien ejecuta las ordenes de quien ésta detrás de todo, Gelmud. Su llegada aviva a Gabil, intenta matarlo para que el Orc Lord lo coma y evolucione, pero se ve frustrado por Rimuru, quien protege al lizardoman y se dedica a castigar a Gelmud, con un par de golpes lo hace retroceder y acercarse a su creación. El Orc Lord empieza a moverse y la confianza de Gelmud lo hace no preveer lo que estaba apuento de suceder, y, en la situación que se encontraba, contra las cuerdas, solo le queda la muerte, que le llega de forma repentina, por la espalda y desde su propio bando, el Orc Lord lo mata y se lo come.
El orc no tuvo la culpa, le dijeron que actuara rápido y se convirtiera en el Orc Disaster, él hizo lo que le ordenaron y se disponía a cumplir con el cometido para el que fue creado. Éste ser ya no es el mítico Orc Lord, ahora es Demon Lord, ¡PUTO DEMON LORD! Me siento como cuando en DBZ dejaban que el enemigo alcanzase el estado final, su forma perfecta, para después aniquilarlo como si nada. Ante el levantamiento de éste ser, el grupo de kijin hacen su esfuerzo por acabarlo, le cortan la cabeza y lo queman, pero no pasa más allá de un mero daño, a lo que el Señor del Hambre se recupera haciendo lo que mejor hace, comerse a alguien, ésta vez uno de sus hombres se sacrifica por el bien de su señor.
Tras esto, Rimuru decide entrar en combate, pasando al modo automático, Gran Sabio toma el control de la situación y hacen ver muy bien al slime, realizando movidas de lo más interesantes y le cercena un brazo y arruina el arma de su oponente. Geld hace gala de sus poderes regenerativos, una vez más, y recupera su brazo perdido. El orco, ya recuperado, agarra a nuestro slime con la intensión de comérselo, pero Gran Sabio hace su última jugada con la que tenía planeado acabar con su rival, un circulo mágico del cual surge una gran pila de fuego, pero al igual como le pasó al ifrit cuando la usó contra Rimuru, el Demon Lord posee protección al fuego.
Cuando ya empezaba los recálculos para arremeter nuevamente contra el enemigo, Rimuru le pide a Gran Sabio que se retire y le deje el resto a él, ya que descubrió como acabar con el Señor del Hambre, hay que enfrentar a las dos habilidades únicas y solo una de ellas va a sobrevivir y, por supuesto, la de Rimuru ganará. El slime consume al orco y consigue acabar con la insaciable hambre que poseen los orcos, perdiendo la guerra y retirándose a sus tierras.
Tuvimos una escena muy buena en que el orco y el slime ven los recuerdos del primero, que lo motivo a aceptar la oferta de Gelmud y volverse la calamidad andante que azotó distintos pueblos, y le dice al slime que su determinación es la que no podrá ser vencida, pero Rimuru responde diciendole que más allá de las habilidades, las motivaciones, las intenciones hay algo más poderoso que el orco no ha considerado, y es la codicia, el slime afirma ser capaz de poder vencerlo, comiendolo, y con él también los pecados tanto personales como los de su gente. Ante eso, Geld se rinde, y termina siendo devorado completamente por nuestro protagonista, con su muerte, ya no hace efecto su habilidad, por lo que los demás orcos detienen su avance y no tienen la necesidad todo ser viviente que pillan en el camino.
Fue un muy buen episodio, pero hay algo en lo que quiero tomarme unas palabras, el personaje del Orc Lord, Geld, es un personaje realmente interesante, si bien, sus actos fueron malos y todo, amenazó el orden natural del Gran Bosque de Jura y sus habitantes, pero ¿Realmente es alguien malvado? Pongamoslo en papel, si bien no haremos análisis de sus habilidades ni de sus características, si voy a hablar sobe su lineamento, que es a lo que se refiere la pregunta, el es el líder de su pueblo, y su pueblo estaba en una situación crítica, iban a perecer, por lo que se ve aceptado a tomar el trato de Gelmud, y convirtiéndose en la calamidad andante que vimos. Teniendo en cuenta el trasfondo que tiene éste ser, puedo afirmar a que es bueno, pero caótico, ya que no importa el costo que conlleve, su objetivo no tiene nada de malo, y cumple el rol que le corresponde, como líder de su pueblo, la preservación de éste es esencial. Ahora bien, los medios que usó no son los ortodoxos, ni armoniosos, por lo que hace que lo tache como caótico, ya que no tiene leyes que lo rijan ni tampoco actúa acorde a su voluntad, actúa acorde a su voluntad, un hambre desmedida, un elemento del caos.
Ya finalizando el episodio, Rimuru estaba dispuesto a que los Kijin siguieran su propio camino y reconstruyeran su aldea, pero Benimaru toma la palabra, y en nombre del pueblo Kijin, deciden seguir bajo el mandato de Rimuru. Para ir cerrando el artículo, lo repito, fue un muy buen capítulo, espero el siguiente con las consecuencias de la batalla y que es lo que nos traerá el siguiente arco ¡SI USTED LEE LA NOVELA FAVOR DE NO SPOILEAR! la siguiente semana se va a venir sabroso porque supongo que ha de aparecer la driade y por ahí se puede armar algo interesante, me despido y nos reencontramos la siguiente semana.
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