El capítulo parte de forma curiosa, en un funeral y es el de los padres de Subaru, nuestro protagonista, tras esa escena vemos a nuestro protagonista en un café junto a su editor, Kawase, quien le hace entrega de unos libros que pidió el mangaka, pero a éste último se le nota incómodo, las multitudes y grupos de gente son algo agradable para él y el ruido, nuestro protagonista declara que el ruido le es molesto y no le permite trabajar, ni siquiera es un "no puedo trabajar a gusto", él se bloquea y no puede pensar.
Lo siguiente que vemos es al mangaka en la tumba de sus padres, presentando sus respetos, y dejando una ofrenda, y como bien ya dije en el párrafo inicial, salta una gata de la nada tomando las piezas de pescado traídas por Subaru, ésta acción, además de la mirada del animal, le dan un momento de inspiración, decidiendo al temática de su siguiente libro.
Ya en su casa, se dedica a una observación de la actividad del gato, tomar notas de ello y empezar a escribir el primer capítulo. Mientras escribe, llega un amigo, supongo de la infancia, de la infancia que ha vuelto del extranjero, y está asaltando la nevera de nuestro protagonista, le cuenta su historia y se da cuenta que su amigo ahora tiene una gata y se alegra por él, es un avance que intente socializar, aunque sea con una felina.
Ya pasando a otro plano, el editor de Subaru lo llama preguntándole si le llegaron las cosas que le envío, elementos para el cuidado de la gata, incluyendo una revista, y en la oficina le dicen a Kawase que ponga ojo en su cliente cercano a las fechas de entrega. En tanto, en la casa de nuestro protagonista, el final de mes se acerca y por tanto el primer capítulo debe de ser entregado al editor, por lo que la presión de terminar el trabajo se va sintiendo en Subaru, no duerme, no come, y la gata lo sabe, por lo que se preocupa por aquel humano que lo ha alimentado. Y bueno, las preocupaciones de su editor estaban en lo cierto, lo siguiente que sabe el mangaka es que despierta en el suelo en el umbral de la puerta de su oficina y el pasillo, tapado con un manta y junto al plato de comida de la gata vacío. Su editor le explica porque esta con él, y ambos constatan que el trabajo ya está hecho, solo le falta transcribir sus notas al manuscrito que debe terminar para poder dejarlo en manos de su editor, una vez hecho eso, y verificado que llegase el encargado de reponer el vidrio de la ventana por la que entró, dejo tranquilo a Subaru y se marchó un poco más tranquilo.
Uno pensaría la historia ya se contó, ya terminaría esta parte, por lo que ahora veamos que sigue más adelante, temporalmente, pero éste anime nos dice que no, y fue una de los elementos que me sorprendió y me gustó, y me animo a seguir éste anime, que es la narrativa nuevamente de ciertos hechos, ahora con algo muy simpático, es la perspectiva de la gata, pero lo distinto es que es un monólogo que no influye en nada en la narración que nos muestra tanto el editor, como tercera persona que lo ve todo desde su trono o sitio de observación privilegiado, ni de la narrativa en primera persona que nos ofrece el protagonista. La gata nos narra sus razones de porque acepto ir a la casa de éste humano y como percibe el hecho de convivir con él, primero se trató de saldar cuentas, devolver el favor por ser alimentada y listo, me largo a seguir con mi vida, pero éste humano era distinto, al parecer no se mueve y no come, por lo que le pone difícil el poder hacer su retirada, ya que aprendió de que es fundamental devolver los favores. Además de un sin número de situaciones que le parecen desconcertante el actuar de éste peculiar hombre, como botar la comida que le da o que se encierre y no pueda ver lo que hace, por lo que se ve obligada a llevar su plato de comida hasta la puerta que los mantiene separados.
También nuestra gata nos ofrece parte de su trasfondo, de que en realidad proviene de una camada de más gatos y llega un momento en que toca mis fibras sensibles con su historia, volvemos a ver que el mangaka se desmaya por la fatiga y, para la gata, es algo más. Le activa un recuerdo que, extrapolando el hecho de la complejidad de sentimientos comunicados y el entendimiento de estos a un animal no humano, asumo es doloroso para ella, y bueno, se queda tranquila cuando ve que el humano comió, aunque le desconcierta el hecho de que se ponga a tomar notas y luego caiga dormido en un periodo de tiempo muy rápido, verifica solo que éste durmiendo y no algo más. Lo siguiente ya lo vimos, aunque opino que hubiera sido simpático que nos mostraran como la gata ve que alguien rompe el vidrio y entra a la casa, siento que faltó eso, pero seguro que no cabía dentro del capítulo.
Ahora queda lo siguiente tras la ida de su editor, la gata ya se siente con la libertad de irse, pero su ¿Consciencia? No, instinto, si, su instinto le dice que no puede abandonarlo, apenas puede caminar sin tambalearse y espera que éste humano sea capaz de comer por si solo, y quiere cerciorarse de ello, cuando Subaru abre su despensa, saca una lata de atún y ocurre la magia, nuestra gata queda embelesada por la aparición de dicho manjar ante sus ojos, y no duda ni un segundo en lanzarse a pedirle al humano que le convide de eso, tomando la decisión de quedarse a vivir con él.
Y el capítulo acaba con esa última escena, muy grata sorpresa me lleve con éste anime, que si bien, cuando estudiaba la temporada el año pasado me había llamado la atención, pero no creí que efectivamente iba a ser como lo he narrado en los párrafos anteriores, felizmente seguiremos la emisión de éste anime en taberna, no lo veo como el gran hit de la temporada, es muy difícil que supere el hype que generan muchas segundas temporadas de buenos animes como Kakegurui y Mob Psycho o la entrega de Date Alive de éste año, pero eso no le quita créditos éste anime que, para alguien como yo que no verá segundas partes en ésta temporada, lo tenga como de los puntos a destacar en éste verano, espero que a ustedes también les haya gustado éste primer capítulo, y solo queda esperar la siguiente semana, nos reencontramos pronto, adiós.
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